El Ayuntamiento de Gavà está trabajando en los preparativos de la temporada de baño para aplicar las medidas necesarias que garanticen un uso social de acuerdo con las condiciones derivadas de la Covid-19. La playa se adaptará a los requerimientos de las autoridades sanitarias para proteger la salud de los vecinos de la ciudad y del barrio de Gavà Mar y de los visitantes. Y al mismo tiempo, se prepararán todos los dispositivos y servicios necesarios para el uso recreativo.
El plan de desescalada indica que el uso abierto de las playas no se permitirá hasta la fase 3, y siempre en condiciones de seguridad y distancia social. Esto significa que habrá que esperar, como mínimo, hasta el 8 de junio, cinco días antes de la fecha inicialmente prevista para dar el pistoletazo de salida a la campaña de verano, que el Ayuntamiento prevé activar el sábado 13 de junio.
Actualmente, aún inmersos en la fase 0, sólo se permite el acceso a la playa de Gavà para pasear, siempre que esto no implique un desplazamiento de más de un kilómetro, o bien para practicar deportes individuales, incluidos náuticos, dentro del término municipal. No se permite el acceso a las áreas de juego, que se mantienen precintadas. Tampoco tomar el sol ni el baño recreativo.
Coincidiendo con el inicio del desconfinamiento, el Ayuntamiento ya ha comenzado a desplegar las primeras acciones para garantizar la seguridad y el cumplimiento de las normas vigentes en la zona costera:
- Delimitación de los accesos con Castelldefels para evitar desplazamientos entre municipios.
- Señalización del acceso a la avenida del Mar (zona de Can Torelló) recordando las franjas horarias para pasear o hacer deporte según los grupos de edad.
- Refuerzo de la vigilancia por parte de la Policía Municipal durante los fines de semana con cuatro patrullas diarias (dos en turno de mañana y dos de tarde), quads para el control en la arena y controles estáticos.
- Intensificación de la limpieza y de la desinfección (con dos intervenciones diarias) los fines de semana. Instalación de los contenedores y papeleras a lo largo del paseo Marítimo.
Paralelamente, se está avanzando en la preparación de la temporada de verano, que se adaptará a la evolución de la pandemia y las consecuentes instrucciones de las autoridades sanitarias.
A día de hoy ya se han concretado algunos aspectos del operativo:
- Reedición del dispositivo de movilidad sostenible en la playa para preservar el carácter urbano-residencial de la playa y sus valores medioambientales. Se basa en dos ejes: la promoción del acceso a la playa en transporte público, en bici o a pie y, a la vez, la reducción de las plazas de aparcamiento libre, delimitando zonas naranja de aparcamiento reservado para vehículos censados en Gavà durante los fines de semana y festivos.
Este verano, la zona naranja se mantendrá en las calles Ametlla, Escala, Palamós, Arenys, Roses, Garraf, Amposta, Palafrugell y Cunit. En las próximas semanas se iniciará el repintado de estas áreas de aparcamiento restringido.
- Señalización de aceras recomendando los peatones circular siempre por su derecha.
- Incremento de la limpieza, así como de las desinfecciones, atendiendo los requerimientos sanitarios.
Asimismo, y en coordinación con el Àrea Metropolitana de Barcelona se está trabajando en la puesta en marcha de los servicios de playa para garantizar el confort de los usuarios y su seguridad, así como la preservación del ecosistema dunar.
Preparación de la arena
La semana pasada el AMB comenzó los trabajos de acondicionamiento de la playa de Gavà, con el labrado de la arena. Estas tareas se hacen con tractores que arrastran unas grandes aradas que remueven y voltean la arena hasta 50 cm de profundidad. El objetivo es airearla y permitir que los rayos del sol penetren para potenciar al máximo la acción desinfectante. Este proceso también ayuda a limpiar los residuos que han quedado escondidos en la arena, lo que también mejora la seguridad de los usuarios.
El labrado requiere una preparación previa de la arena, y previamente se hace un cribado para retirar los residuos que pueda haber en los 10 cm superficiales. Esta misma operación de limpieza mecánica también se repite después de arar para regularizar la arena y dejar las playas totalmente peinadas.
En las playas metropolitanas, el cribado se hace normalmente durante todo el año con diferentes frecuencias en función de la época. La situación excepcional de este año causada por la Covid-19 provocó que estas tareas se detuvieran hace unas semanas, pero se reanudaron el pasado lunes 27 de abril. Desde ahora mismo se intensifica el cribado y a partir de la tercera fase de la desescalada pasará a ser diario.
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