En los últimos 15 años, los episodios de reproducción de tortuga marina de la especie Caretta caretta en Catalunya han aumentado de manera significativa, tal como se desprende del Proyecto de investigación científica para la conservación de la nidificación de la tortuga boba (Caretta caretta) en Catalunya, liderado por expertos de las principales Universidades y Centros de Investigación, y en que la Generalitat participa desde de 2015.
Entre otras cosas, el estudio quiere determinar si este aumento de la nidificación en el Mediterráneo Occidental se debe al calentamiento global. Así, la Generalitat ha colocado en los últimos 5 años entre 5 y 9 sensores de temperatura anuales a varias playas de Catalunya con gran variabilidad entre ellas: desde playas más frías del Alt Empordà hasta las más cálidas del Delta de l’Ebre o la playadel Torm a Vandellòs y l’Hospitalet de l’Infant, con un tipo de arena que la hace especialmente caliente. Así se podrá determinar la capacidad de las playas de Catalunya para hacer viable un nido en relación con la temperatura de la arena.
Más de 10 nuevos confirmados en Catalunya
Desde el año 2014 prácticamente cada verano ha habido algún intento de nidificación e incluso nidos exitosos. Sobre todo, en la zona del Delta de l’Ebre y el Maresme. El primero data de 1990, en el Delta de l’Ebre, y el último el año pasado en Castelldefels. En total, se calcula que en los últimos 15 años habrían nacido más de 500 crías de tortugas.
También se han registrado hasta siete intentos de nidificación, de hembras adultas que han llegado a playas con la intención de hacer nido, pero han vuelto al agua sin hacerlo, principalmente al ser estorbadas por personas.
Inicio de la temporada reproductora el 1 de junio
Lunes 1 de junio comenzó la temporada durante la cual se podrían vislumbrar puestas de esta especie protegida y catalogada como vulnerable, que se alarga hasta octubre. Coincide así con la temporada de baño y disfrute de las playas. Además, las instalaciones artificiales tales como chiringuitos, alumbrados o paseos marítimos, así como la interacción con los diferentes agentes (personal de limpieza, turistas y peatones) pueden afectar la orientación o el comportamiento de los animales. Además, a menudo estos hallazgos despiertan el interés mediático y se hace vital establecer un protocolo para actuar y sensibilizar a la ciudadanía hacia un comportamiento responsable.
Campaña de sensibilización
Para aumentar la conciencia ciudadana de esta fragilidad y de la importancia de no estorbar a los animales para facilitar la reproducción de esta especie protegida, la Generalitat, junto con el proyecto Caretta a la vista de la Universidad de Vic y varios ayuntamientos iniciaron el 2015 una campaña de sensibilización, con material divulgativo para redes sociales, paneles en las playas y sesiones formativas específicas para incidir en la importancia de no tocar ni molestar nunca una tortuga que sea en la playa, especialmente si es un animal grande y llamar inmediatamente al 112.
Caretta a la vista ha desarrollado una aplicación gratuita que permite avisar directamente el 112, a la vez que salta una alarma a los teléfonos de guardia del equipo científico, enviando las coordenadas del lugar de avistamiento.
Por otra parte, dado que una de las principales amenazas para las tortugas juveniles y adultas es la captura accidental por artes de pesca, desde el año 2017 la Generalitat mantiene una estrecha colaboración con las cofradías de pescadores sobre todo en la zona del delta de l’Ebre y la Fundación CRAM, para agilizar el rescate de tortugas en caso de capturas, y poder tratarlas rápidamente para maximizar su supervivencia ante el peligro de descompresión. Este proyecto ha permitido recuperar casi 170 tortugas en estos tres años.
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